Skip to content

#PON-UN-TEACHER-EN-TU-VIDA

La elección de un teacher, mejor dicho, de TU TEACHER no es algo fácil: ¿Nativo o no-nativo? ¿Quién sería más competente? ¿Quién va a poder formar mejor a los empleados de mi empresa o prepararme más eficazmente para mis exámenes?

Independientemente de cuál sea tu elección final, deja que te muestre algunas ventajas que tenemos las teachers bilingües.

¿Teacher nativo o blingüe? That is the question

Hay una desinformación muy grande por parte de empresarios y particulares que vienen considerando a los nativos como “de mayor calidad”. Sin embargo, a lo largo de mi trayectoria profesional he podido comprobar que los alumnos (da igual adultos que niños) no son tontos, y tienen muy claro lo que quieren: un buen profesor, que les motive y les ‘meta caña’ para lograr sus objetivos, NO una etiqueta.

Como teacher, cuento con una formación especializada en la enseñanza del inglés como segunda lengua, una metodología, filosofía (Always be the hardest worker in the room) y materiales propios.

Por el mero hecho de ser española no me considero con la cualificación suficiente como para impartir clases de español. No es mi campo y desconozco muchas de sus particularidades, fundamentalmente porque el aprendizaje de la lengua madre (mother tongue) se basa en la observación y práctica.

Y es que, no creo que el lugar donde se nazca sea determinante. That’s it.

Me encanta cuando mis alumnos me dicen: “¡Teacher, eso es justo lo que estaba pensando!, ¿cómo lo sabías?”. No es magia (aunque lo parezca). Como también hemos sido students, podemos identificar y anticiparnos a los problemas que puedan surgir durante las sesiones y, en caso de que exista alguna dificultad o parte problemática, siempre podemos recurrir al español para solucionar dudas o hacer puntualizaciones.

Al ser teachers bilingües, nuestra experiencia previa como students nos sitúa en una posición privilegiada para orientar a los alumnos en cómo realizar sus tareas, mejorar sus técnicas de estudio o aplicar lo aprendido en su día a día laboral/ académico, puesto que ya hemos estado en su misma situación.

No pretendo echar más leña al fuego (add fuel to the fire), sino simplemente reivindicar una posición que, por esfuerzo y méritos propios, creo que nos hemos ganado.

En mi caso, siempre que quiero darle una vuelta de tuerca (give a twist) a mi speaking y añadir más matices a mi pronunciación me gusta acudir a un native teacher. ¿Por qué? Sencillamente porque hay usos y expresiones que son propios de un país, ciudad o incluso comunidad.
Para mí es un reto (challenge), pero también la mejor oportunidad para llevar mi inglés a otro nivel (to another level), y lo bueno es que siempre podemos seguir progresando) ya que el inglés, como todo idioma, es una lengua viva y en continuo cambio y evolución.

¿Cuál es mi propuesta como Teacher desde hace más de 10 años?

Busca al profesional que más se adapte a tu forma de ser y de aprender, alguien con quien conectes y que se implique en tu aprendizaje y, cuando lo encuentres, ya está, ¡has encontrado a TU TEACHER! (se recomienda no dejarlo escapar).

Y recuerda, my friend: “Teachers affect eternity; no one can tell when their influence stops.” (Un profesor trabaja para la eternidad: nadie puede decir dónde acaba su influencia) – Henry Adams

Comparte la entrada